Los
hermanos Urdey, Alejandro y Ómar Pitalúa Aguilar permanecían ayer en el área de
recuperación del Hospital Universitario de Sincelejo luego de ser baleados la madrugada de antier en una fiesta en
Berlín, corregimiento de San Onofre.
Según
manifestaron lugareños, la riña inició cuando un sujeto, que estaba acompañado
de dos más, le agarró la nalga al menor de los hermanos (Alejandro), ante la
ofensa, el joven salió a reclamarle al sujeto, pero uno de sus compinches sacó
un arma de fuego y disparó contra Alejando, impactándolo en el hombro, cayó
tenido al suelo. Urdey, al percatarse de la situación, corrió hacia el sujeto
en defensa de su hermano, pero antes de llegar, tres tiros lo frenaron: uno en
el pecho, otro en la boca y el último en la mano.
Con
todo y eso Urdey se habría defendido, apuñalando a su agresor en el abdomen.
Ómar
intentó ayudar a su hermanos, pero tan pronto se movió lo inmovilizaron con un
tiro en la costilla. En ese momento, que los tres hermanos estaban en el suelo,
uno de los armados se acercó con la intención de rematarlos, es ahí donde
aparece un primo de los hermanos, quien le parte una botella en la cabeza al
agresor, dejándolo tendido en el suelo. Los hermanos fueron auxiliados y
llevados al hospital local, de donde luego fueron trasladados a Sincelejo.
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