Se fue sin decir por qué Quibdó
se ‘coló’ en el documento que está en estudio del Concejo Municipal.
La
Alcaldía de Sincelejo liquidó, de común acuerdo, con el economista y consultor
en alta gerencia pública Arnulfo Roncancio Sanabria el contrato de prestación
de servicios por 126 millones 720 mil pesos que había firmado el 12 de marzo para prestar asesoría al despacho del mandatario, para hacer un
estudio de cultura ciudadana y para asesorar la elaboración del plan de
desarrollo del cuatrienio.
La
liquidación del contrato que debía ejecutarse en 9 meses y 18 días y cuyo
primer pago se efectuaría en los 3 primeros meses por un
valor superior a los 30 millones de pesos, se
produjo el 14 de mayo en momentos en los que estalló el escándalo en redes
sociales y en medios de comunicación sobre la aparición de la palabra Quibdó en
ese documento.
En
el acta de liquidación del millonario contrato N° 512 de 2020
aducen que el 23 de marzo el consultor había solicitado la suspensión de este porque con
ocasión de la pandemia por la COVID-19 no había podido trasladarse a Sincelejo
a cumplir con su labor, es decir, a ejecutar el contrato, pero esto fue
desmentido por fuentes de la Alcaldía de Sincelejo que dan cuenta que Roncancio
Sanabria todo el tiempo estuvo en la capital sucreña, frecuentaba la sede de gobierno y que el
alcalde en una reunión pública con personal de la Secretaría de Planeación y de
los demás intervinientes en la elaboración del Plan de Desarrollo le
exteriorizó que le cancelaría el contrato.
EL HERALDO llamó y le escribió a
Arnulfo Roncancio para conocer su versión de por qué Quibdó se ‘coló’ en el
plan de desarrollo de Sincelejo donde él era asesor, pero hasta el momento no se ha obtenido respuesta.
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